La embarazada debe recibir información específica sobre prácticas que previenen la aparición de enfermedades que ponen en riesgo su salud y la de su hijo, preparación para la maternidad/paternidad, promoción de la lactancia materna y procreación responsable. Los beneficios de Informar, educar, contener, guiar y apoyar a toda mujer embarazada y su familia se traducen en:
- Contribuir con los fundamentos del parto humanizado.
- Cumplir con las leyes de acompañamiento en el trabajo de parto y en sala de partos.
- Disminuir la morbi-mortalidad perinatal.
- Disminuir el número de cesáreas innecesarias.
- Optimizar recursos económicos y humanos.
- Fortalecer la relación médico-paciente.
- Evitar complicaciones legales.
- Crear un espacio exclusivo para la mujer embarazada, favoreciendo la accesibilidad al sistema de atención.