La exposición prenatal al humo de tabaco es un factor de riesgo para las infecciones respiratorias, asma, alergias, cáncer infantil y tiene consecuencias neuroconductuales en la salud de los niños.
El consumo de alcohol durante el embarazo puede afectar el coeficiente intelectual, la salud mental, la memoria y la visión del niño según una revisión de varios estudios.
Los hijos de madres adictas tienen mayor probabilidad de hospitalización después del alta y mayor mortalidad.
Se brindara apoyo y control especial a todas las embarazadas en esta situación, en coordinación con CENTRO POR LA VIDA.