A través de la educación vamos a organizar y realizar actividades que favorezcan el aprendizaje de la Lactancia materna como estrategia de prevención y de disminución de la morbi- mortaliad infantil.
Se proporcionarán conocimientos sobre extracción y conservación de la leche materna a fin de facilitar la reincorporación laboral de la madre.
Se instara a la adhesión de parte de otras instituciones, empresas y otras entidades donde trabajen mujeres en situación de lactancia a la creación de ESPACIOS AMIGOS de la Lactancia, a fin de facilitar el mantenimiento de la misma durante este periodo.
La adaptación de la leche materna a las necesidades del bebé es total, ya que es un alimento completo que difícilmente podrá ser imitado por algún otro. Entre sus nutrientes se encuentra la taurina, un aminoácido esencial para el desarrollo del cerebro, también contiene lactosa (el azúcar propio de la leche) que favorece el desarrollo de la flora intestinal, a la vez que protege al bebé de ciertos gérmenes responsables de la gastroenteritis.
En cuanto al contenido de grasa, ésta se adapta totalmente a las necesidades del niño o niña.
Además, posee minerales y vitaminas para que el niño o niña no necesite de ningún aporte suplementario mientras tome pecho.
También ofrece anticuerpos, en especial la inmunoglobulina conocida como Ig A, cuya función principal es evitar las infecciones en las vías respiratorias y digestivas.
Es el alimento de mejor digestión y absorción para los lactantes; es la fuente natural de nutrientes más eficiente y supera a la de cualquier fórmula modificada o artificial.
Contiene células y anticuerpos que protegen al niño o niña contra enfermedades, tales como: alergias, diabetes, infecciones respiratorias, infecciones urinarias, otitis, diarreas y caries.
Podemos resumir que la leche materna es lo mejor.
De allí que el niño o niña no requiera de otros alimentos y pueda ser alimentado exclusivamente con leche materna hasta los seis (6) meses de vida.